domingo, 27 de marzo de 2016

Cuando la Patria dice Adiós





La estrategia de la dirección de la oposición venezolana ha sido aciaga, el tiempo de dios ha sido tan largo, que para millones de venezolanos, Venezuela solo es un país de tránsito, no de permanencia ni de arraigo,  sino de tránsito a otros destinos donde se vislumbre alguna esperanza de prosperidad y paz. 

Las cosas tienen un tiempo adecuado, no puedes dejar hervir el quesillo porque se daña, no puedes dejar que el almíbar sobrepase el punto de caramelo porque se arruina.  Lamentablemente la oposición no dio respuesta y más de 2 millones de Venezolanos se han marchado del país (hoy al 30 de Septiembre del 2018 son mas de 4 millones de venezolanos que se han visto forzados a emigrar), quedando una Venezuela llena de padres sin hijos,  de familias divididas que solo aspiran a reunirse fuera de este país que ha sido destruido por la acción del gobierno totalitario chavista, de sus militares, y de la pasividad negligente de la dirección opositora.

Solo hacer el ejercicio mental de contar familiares,  ex compañeros de estudios, amigos, conocidos o relacionados, nos muestra la estampida que ha ocurrido y que ocurre, de venezolanos que escapan de un país con un presente desastroso y un futuro que atemoriza. 

Las encuestadoras, inclusive las pagadas por el régimen indican que más del 50% del venezolano, si pudiera, se iría de un país que en lugar de acogerlo, lo maltrata y lo acorrala.

El chavismo solo es una élite saqueadora y corrupta, cuya permanencia en el poder solo asegurará mantener las penurias para el pueblo y la alegría para la élite del PSUV y sus militares. Por otro lado, la dirección de la oposición no hará nada efectivo para salir del régimen destructor, peor aún, por el discurso de sus dirigentes, escudados en la salida pacífica, pareciera que solo pretenden pactar con un sector del chavismo y de los militares para compartir el poder. De ser así, la esencia de la ruina seguirá en el núcleo del poder, la manzana podrida seguirá haciendo de las suyas, lo que dará como resultado, por un largo tiempo, un país miserable y hostil para una vida libre y próspera, como lo ha sido la Cuba castrista durante más de 50 años.

De corazón digo No a la emigración, pero de cerebro pienso que no hay razones para permanecer en Venezuela, y más serán las tristezas y decepciones que los momentos felices. Si puedes, emigra, total las naciones solo son un accidente en la historia de la gente, Venezuela como patria independiente no llega a 200 años, el futuro es de Latinoamérica sin fronteras, y a ese futuro es al que nos debemos. Total, la patria la perdimos hace tiempo, cuando cambiaron la bandera, el escudo, cuando Páez pasó a ser un traidor, cuando perdimos nuestros sitios de hacer mercado, cuando perdimos la seguridad de sentarnos a conversar frente a nuestra casa, cuando nos asustamos si necesitamos una medicina importante porque no sabemos si la encontraremos, cuando no podemos comprar comida de manera sencilla como lo hace todo el mundo, cuando nos secuestraron los organismos del estado que en lugar de servir nos abruman con su culto totalitario, cuando los ojos de Chávez nos espían con el fascismo que representan. Si puedes emigrar, anda y vete, no mires atrás, nuestra patria es Latinoamérica, Venezuela yace enterrada bajo nuestros pies, solo su fantasma nos atormenta. 

Venancio Loval