Hay momentos en lo que los Pueblos tienen que decir BASTA

Cada día para un pueblo oprimido se abre una oportunidad de decir BASTA. Una oportunidad de no ceder el puesto en el Bus que nos conduce a la democracia, a la libertad y a la prosperidad económica.

Venezuela vive hoy en una franca dictadura, que ya ni la mascara democrática la porta con discreción.  El nivel de soberbia y desprecio contra un pueblo que sufre todos los errores y las corruptelas de la élite del régimen, militar, de boli burgueses, de líderes medios, y de ese micro poder corrupto en la que se basa el régimen totalitario ha rebosado el nivel de lo aceptable.

Hay momentos en las que los pueblos tienen que reaccionar para decir NO a las injusticias,  al desprecio, a la soberbia, a los responsables de un desastre que ha llevado al hambre, carencias mortales en medicinas, y un nivel de vida atroz donde las cosas más simples como conseguir gas de cocina se hace una actividad miserable y tortuosa.

Hay momentos en los que si un pueblo no dice BASTA se mantendrá congelado en la injusticia y en los sinsabores, se condena así mismo a vivir por años una pesadilla de servidumbre y pobreza.  La Alemania Nazi, Corea del Norte, Cuba, la URSS y los países de Europa Oriental muestran lo que cuesta la indolencia y la sumisión.

Pero hay pueblos que a lo largo de la historia se levantan y dicen Basta, le dicen NO a las élites Injustas, Corruptas, Represoras, Cómplices y cambian la ruta de vida para bien de toda la sociedad. 

Hay una obra de teatro que trata sobre la rebelión de un pueblo ante la injusticia del poder, FUENTE OVEJUNA de Lope de Vega. De niño, vivía en un pueblo del centro del país, que tenía una única librería y papelería, allí llegaban los libros de la colección Salvat de literatura, y un día después de reunir con esfuerzo lo necesario para comprar mi primer libro, compré FUENTE OVEJUNA  de Lope de Vega. Antes había leído en la enciclopedia Quillet algo de Fuente Ovejuna y me imaginé que era un historia maravillosa. Después que compré el libro y lo empecé a leer me sentí decepcionado no me atrapaba. Era un niño de 10 años tratando de leer una obra de teatro. Leí unas cuantas páginas nada más y abandoné. Luego en la misma librería compré Los Viajes de Gulliver, Robinsón Crusoe, libros que leí y disfrute como nunca. Pero siempre Fuente Ovejuna me quedó como una deuda de lectura. Con el tiempo lo leí y hoy la situación del país me lo recuerda.

FUENTE OVEJUNA es una obra de 1615 de Lope de Vega, presenta la historia de un pueblo de ese nombre que se cansa de los atropellos del Comendador y toma la justicia en sus manos. Cuando llegan las autoridades a investigar quién cometió el acto, nadie habla. Ante la pregunta ¿Quién mató al comendador?  Todos dicen “FUENTE OVEJUNA, señor”.

De la historia hay que rescatar la rebelión y la unión monolítica del pueblo ante la injusticia. Dejando atrás la violencia que presenta, cosa de lo más que usual en esos años, su ejemplo es importante para que un pueblo enfrente con unidad y solidaridad, pacífica y democráticamente  un régimen injusto, inepto, corrupto y represor.

A veces, algo tan simple como no levantarse de un puesto en un Bus, hace que un pueblo sometido se levante unido para hacer respetar sus derechos. Esa es la historia de Rosa Park, quién como cosa curiosa un 1 de diciembre de 1955 no cedió su puesto en un bus a un blanco como lo exigía el chofer blanco del autobús. Ese gesto disparó la rebelión pacifica del pueblo negro de Estados Unidos que logró erradicar el racismo atroz que reinaba en USA, y llevó a que hoy el presidente de USA sea negro. 

En respuesta a la condena a cárcel de Rosa Park se orquestó un boicot en el transporte público liderado por Martin Luther King. Los blancos racistas respondieron incendiando la casa de Martin Luther King y de Ralph Abernathy, al igual que cuatro iglesias Bautistas negras. Los líderes del boicot fueron atacados físicamente. Luego del ataque de su casa, King dio un discurso que ilustra la rebelión pacifica ante la injusticia, pero firme, que podemos extrapolarlas en cuanto al respeto a la palabra y a las ideas democráticas y éticas que deben guiar todo liderazgo.

“Si tienen armas, llévenlas a su casa; si no las tienen, por favor, no intenten obtenerlas. No podemos resolver el problema a través de violencia por represalias. Debemos enfrentar la violencia con no violencia. Recuerden las palabras de Jesús: "El que vive por la espada perecerá por la espada". Debemos amar a nuestros hermanos blancos, sin importar lo que nos hagan. Debemos hacerles saber que los amamos. Jesús todavía pide a gritos en palabras que hacen eco a lo largo de los siglos: "Ama a tus enemigos: bendice a los que te maldicen; reza por aquellos que te usan en forma odiosa". Esto es por lo que debemos vivir. Debemos enfrentar el odio con amor. Recuerden, si soy detenido, este movimiento no se detendrá, porque Dios está con el movimiento. Vayan a sus hogares con esta fe elogiosa y esta seguridad radiante.” M.L. King 1956

La No Violencia, no implica que no habrá violencia, al contrario con mucho probabilidad la habrá  pero de un solo lado, del lado injusto. Pero el miedo a la Violencia de los Injustos no puede detener la protesta pacífica. El miedo a ser encarcelado no detuvo a M.L. King ni a Mandela, ni debe detener a un liderazgo en una lucha justa. Menos aún, no se debe ceder en cuanto a Principios, y a las palabras que son avatares de esos principios. Es inimaginable que M. L. King aceptará que Rosa Park era solo una simple Persona Detenida, o que el estado tenía razón y que Rosa Park No Acataba una ley injusta y racista. En fin, lo último que se pierden son los principios, y eso solo sucede si estamos derrotados espiritualmente. No se pueden entregar en la primera negociación.

Cada día es una oportunidad de decir BASTA, de no ceder el puesto del Bus que nos conduce a la democracia, a la libertad y a la prosperidad económica. Todos juntos,  en rebelión contra la injusticia, el desprecio, la corrupción y la represión de la élite chavista.  ¿Quiénes? ¡Venezuela, señor!

Venancio Loval